La Norma GRASP (GlobalGAP Risk Assessment on a Social Practice) evalúa el tratamiento y las buenas prácticas sociales en las explotaciones agrícolas. Su misión es asegurar  las correctas prácticas relativas a salud, seguridad y bienestar de los trabajadores en las granjas de producción.

La norma cuenta con 11 puntos de control más uno voluntario a través de los cuales se abordan cuestiones específicas relativas a temas de seguridad, salud y bienestar de los trabajadores.

GRASP es un módulo voluntario que ha sido desarrollado para profundizar en los aspectos sociales de GlobalGAP, y puede implantarse a la misma vez que este.

El módulo GRASP está desarrollado para profundizar en los aspectos más sociales de este estándar. Su aplicación aporta numerosos beneficios como el de rebajar los costes de rotación del personal, ya que ayuda a mantener a los buenos trabajadores en su plantilla durante más tiempo.

Al implantar estas medidas también aumentará su estatus entre clientes y proveedores. Demostrará además su compromiso con la responsabilidad social. Y evitará los riesgos de incumplir la normativa vigente relacionada con los derechos de sus trabajadores.

Otro de los grandes beneficios es el de crear un buen ambiente de trabajo que ayude a sus empleados a mejorar la responsabilidad hacia su explotación, permitiendo una comunicación más clara y propiciando la participación de los trabajadores.